All I Wanna Do Is Rock...

Thursday, December 08, 2005

Estaba Yo Hablando Con Unos Ingenieros...

...Cuando encontré mi vocación. Es como eso de encontrar el punto G cuando uno ni lo está buscando, se siente bien chido y todo el mundo termina feliz.
Si yo hubiera nacido en otros tiempos y condiciones, hubiera sido un excelente Onirocrítico (de esos que se llevaban en las campañas militares griegas y todo eso para analizar los sueños de los poderosos y extraer presagios del futuro de ellos) (bueno, ya, igual me hubiera gustado un chingo usar una toga y sandalias para ir al trabajo) (bueno, me vale madres, la voy a usar de todos modos). O igual y si hubiera tenido más dinero y paciencia me hubiera podido dedicar al estudio del psicoanálisis, que es como la equivalencia de la Onirocrítica moderna.
Pero esas son cosas tristes, y este es un post alegre porque he encontrado mi verdadera vocación. Me di cuenta hablando con los ingenieros de que puedo iniciar y mantener una conversación con prácticamente cualquier persona, sin importar lo poco que tengamos en común, o inclusive lo mucho que tengamos en descomún. Además, y por si fuera poco, puedo tomar palabras que nunca he escuchado e incorporarlas a un discurso coherente, e inclusive discutir con gente que sabe del tema (totalmente ajeno para mí) y salir airoso la mayoría de las veces, con una plácida e impávida sonrisa en el rostro.
El lector sagaz y que me conoce debe tener suficiente con esos datos para deducir mi vocación ideal: voy a ser espia. Si lo piensa uno bien, realmente soy un estúpido por no haberlo visto antes. Soy inteligente y sagaz (ya use esa palabra dos veces en el mismo parrafo, ¿ven? también soy observador); tengo facilidad para los idiomas, podría aprender todas esas lenguas europaorientales necesarias para mis menesteres espiosos; Igual soy ágil, grácil y silencioso, capaz de escalar superficies escarpadas y de deslizarme como un gato y desaparecer en las sombras de la noche cual Ryu Hayabusa, o de hurtar de la manera más elegante un importantísimo microfilme (debo confesar que al menos el 90% de mis deseos de ser espía vienen de robar microfilmes, ni se que son ni que hacen claramente, pero se ven bien chidos y se los roban en todas las películas de espias).
Pero ante todo quiero aclarar que cualquier profesión que me exija/permita sedur a elegantes y peligrosas mujeres rusas y rubias para tener éxito (y excitación) es mi tipo de trabajo, ya que de alguna manera me desenvuelvo naturalmente en tan refinadas actividades. Además no mamen, siempre ha sido lo que he deseado. Puedo viajar por el mundo, acostarme con mujeres hermosas de todos los sabores y colores, usar mis superpoderes y multitalentos que tan desperdiciados se encuentran rodeado de tanto tercermundista como ustedes comprenderán (A manera de demostración vivencial, dejenme referirles que Mérida tiene una feria ganadera al año, y ese no es el mejor ambiente pa que se aprecien mis dotes de espía), e inclusive podría llegar a saciar mi sociopática sed de riesgos, aventura y peligro que me impide volverme un miembro productivo de la sociedad (jejeje, dije "miembro"). Además, realmente, piénsenlo, podría poner en práctica mis habilidades de conversación y entreteniciencia, además de la capacidad de hilar millones de datos estúpidos a cualquier charla. O sea, no tengo perfectamente claro como ayudaría eso, pero estoy seguro de que no puede estorbar.
Bueno, ya, no quiero que quede muy largo el post porque luego nadie lo lee, y a mí me da sueño escribiéndolo y se pone cada vez más incoherente, así que solo diré un par de cosas más. Ser espía tiene por lo menos dos grandes inconvenientes (realmente lo he pensado): ha de ser difícil convertirse en uno, digo, no es como ser mormón; en serio, ¿como chingados se le hace? O sea, es verdad que yo tengo todos los requisitos, e incluso los excedo, pero ¿a donde voy para que los noten? Mi solución tentativa a este problema es robar algo importante de alguien poderoso y devolvérselo antes de que se de cuenta de que les falta, y así van a decir "a huevo, este guey es bien cabrón" y me van a dar un chingo de armas y aparatos tecnológicos todos locos y mujeres todas locas y autos rápidos y un compañero negro para que lo maten a los 15 minutos. El otro problema se resume esencialmente en que ser espía de verdad ha de resultar tremendamente aburrido. Seguramente tienes que saber millón y medio de datos sutiles y variables de la situación política internacional, conocer miles de nombres de políticos e ir a cientos de fiestas y eventos somníferos para recolectar información que solo puede ser catalogada de emocionante en un contexto de gente de 80 años. Todos los yates rápidos, lasers mortales, guaridas subterraneas ocultas en un volcan y femmes fatales praguenses besándose mutuamente en la lluvia con sus escasas ropitas parecen condenados a la ficción. Pero no, lo mas importante es que yo tengo lo que se necesita, y tengo fe, y tengo necesidad de dinero, y más que nada, tengo un plan bien cabrón para volverme un doble agente pero no puedo decírselo, porque tendría que matarles (y envolverles en una alfombra y arrojarles a un precipicio).

Tuesday, November 22, 2005

Nada, No Somos Nada (¿Somos Nada?)

El buen Thomas Carlyle, además de ser Historiador, Escoces, y quien sabe cuantas cosas más, era muy recomendado por Borges, quien es muy recomendado por el presente Blog, y nos dejó, entre otras cosas (Thomas Carlyle, no Borges, ni el presente blog), este cuentecillo que se llama "Un Auténtico Fantasma".

¿Habría algo más prodigioso que un auténtico fantasma? El inglés Johnson anheló, toda su vida, ver uno; pero no lo consiguió, aunque bajó a la bóvedas de las iglesias y golpeó féretros. !Pobre Johnson! ¿ Nunca miró las marejadas de vida humana que amaba tanto? ¿Ni siquiera a sí mismo? Johnson era un fantasma, un fantasma auténtico; un millón de fantasmas lo codeaba en las calles de Londres. Borremos la ilusión del Tiempo, compendiemos los sesenta años en tres minutos, ¿qué otra cosa era Johnson, qué otra cosa somos nosotros? ¿Acaso no somos espíritus que han tomado un cuerpo, una apariencia, y que luego se disuelven en aire y en invisibilidad?

No Digan Que No Se Los Dije

Me caga el altruismo, de verdad. Me caga más el altruismo institucional. Odio que esté "in" dar, o ayudar, o lo que sea. Si usted hubiera estudiado psicología y fuera obligado a tener buenos y altruistas sentimientos hacia los demás y eso fuera políticamente correcto y viera usted a sus compañeritos en una guerra de buenos sentimientos a ver quien tiene los mejores y así recibir los favores de los maestros, quizá comprendería usted mejor este post.
Pero independientemente de eso, me caga. Nomas el número de veces que se le pide a un ciudadano promedio "redondear" (donar la cantidad de dinero que falta para la siguiente cifra cerrada cuando uno paga alguna cuenta a alguna caridad, que va desde ayudar a los niños con Cancer hasta generar fondos para salvar las especies en extinción y demás pendejadas, pasando por publicar otro libro de Marta Sahagún o llevar a más gueritos a sentirse bien alimentando a los negros o a los animales) en un día es suficiente para mandar a toda la economía de un país pequeño al olvido. Si yo redondeara todas las veces que me lo preguntan, ya estaría pidiendo limosna en las calles. El redondeo va a ayudar a crear un país de pobres. Pronto vamos a necesitar un redondeo para ayudar a las víctimas que perdieron todo su dinero redondeando.

¡Vaya, esto es mucho más divertido que acariciar a las cabras en el zoológico, y me cuesta lo mismo! ¿Me pregunto si me veré lo suficientemente rubia en cámara?

Thursday, November 17, 2005

Diablo Tentón...

Para leerse con esto de fondo

Hoy me tentó el diablo, fuerte. Le dije que no. Lo que más miedo me da es lo cerca que estuve de decirle que sí.
Me tentó con un trabajo, estable, remunerado, honesto, en un área para la que estoy preparado, en la que podría ser moderadamente feliz, estabilizar mi vida, crecer, adquirir segurudad, responsabilidades, un rumbo, un camino, dejar esta pinche angustia de no hacer nada más que buscar, dejar la búsqueda, despertar todos los dias a las 7 am, con el día planeado, sabiendo a donde tengo que ir, todo previsto, quizá así podía instalarse en mí el hábito de planear, el sano, productivo habito de planear, primero cosas pequeñas, luego planear la vida, saber donde voy a despertar todos los dias de la vida, no se, casarme (Fond, but not in love), tener 2.5 hijos, un perro, una casa de clase media, una hipotéca, una úlcera, un seguro médico para ayudar con la úlcera, una televisión para no tener que hablar, cerveza, mis cosas, mi dinero, mis cosas, mi casa, un trabajo estable, remunerado, feliz.
Me asusta, de verás, el haberlo considerado.
Pero gané. Seguimos en la búsqueda, seguimos sin futuro, insoportablemente sin futuro.



Total, que si no jala, siempre puedo irme de gira con los Super Lamas, ellos si tienen futuro

Además, se estacionan a la vuelta de donde grabamos el programa de radio. ¿Ven? Sí es un plan serio, ya hasta se donde se estacionan. Solo me falta saber que son.

...fitter, healthier and more productive
a pig in a cage on antibiotics.
Fitter, happier, more productive, comfortable, not drinking too much, regular exercise at the gym (3 days a week), getting on better with your associate employee contemporaries , at ease, eating well (no more microwave dinners and saturated fats), a patient better driver, a safer car (baby smiling in back seat), sleeping well (no bad dreams), no paranoia, careful to all animals (never washing spiders down the plughole), keep in contact with old friends (enjoy a drink now and then), will frequently check credit at (moral) bank (hole in the wall), favors for favors, fond but not in love, charity standing orders, on Sundays ring road supermarket (no killing moths or putting boiling water on the ants), car wash (also on Sundays), no longer afraid of the dark or midday shadows nothing so ridiculously teenage and desperate, nothing so childish - at a better pace, slower and more calculated, no chance of escape, now self-employed, concerned (but powerless), an empowered and informed member of society (pragmatism not idealism), will not cry in public, less chance of illness, tires that grip in the wet (shot of baby strapped in back seat), a good memory, still cries at a good film, still kisses with saliva, no longer empty and frantic like a cat tied to a stick, that's driven into frozen winter shit (the ability to laugh at weakness), calm, fitter, healthier and more productive a pig in a cage on antibiotics.

Friday, November 11, 2005

Esperando a...

Por lo menos ellos saben lo que están buscando.
Yo no, esa es la cosa.
(Estúpidos zombies, ganan otra vez...)
Estoy muy triste o algo así, sin palabras; luego escribo algo en forma.

(no se, no se que es)

Friday, November 04, 2005

Café con Leche y Lluvia.

¿...Quien le dijo que yo era risa siempre, nunca llanto...?

Atento lector: si es usted en realidad un atento lector, habrá notado como los posts en este blog han ido cambiando, aclimatándose para no aclimorirse, haciéndose cada vez más escasos, y más serios/autobiográficos/crípticos, con contadas excepciones que me cuesta cada vez más trabajo realizar/disfrazar.
Tome, por ejemplo, al monje en llamas que hay inmediatamente abajito del presente*. Lleva ahí un buen rato, y un buen rato llevo yo pensando en qué les puedo decir, ¿qué valdrá la pena escribir? Debe ser algo gracioso, impersonal (sobre todo, impersonal), que mueva a la risa, y si se puede, a la reflexión; de preferencia, que esté cargado de ironia y cinismo, y una agresión y desprecio tan sutiles al orden establecido que se pase por alto a más de uno. Todo, claro, redactado en una prosa ligera, comunicadora pero elegante.
La clave es lo impersonal. Si las cosas pudieran seguir siendo como yo quiero, ahí estaría el asunto. Escribiría algo gracioso, divertido, ajeno. Irónico, cínico, mordaz, para distanciarme de todo, para destruirlo, para reirme (y llevarles a reirse) un poco de algo, para que no me vean a mí. Para que ni yo me vea.
Pero no hoy. Hoy no sale.
Pienso (estoy pensando) que tanto es posible separar lo que escribo de lo que vivo, de lo que pienso realmente, de lo que siento, de lo que me pasa (en todos los sentidos de la palabra). Que tanto puedo decirles si quiero seguir escondiéndome de ustedes. ¿Que tanto puedo decirle al mundo, para el caso? Mucho me temo que si me quedo esperando a que surja algo del estilo humoroso que me gustaría sostener ante ustedes, me quede sin escribir nada mucho más tiempo del que ustedes van a concederme la amabilidad de seguir dándose vueltas por aquí.
Y no quiero que se vayan, y más que eso, quiero hablarles, y escribirles, y contarles, y escuchar de ustedes. Muchas veces me dan ganas de contarles millón y medio de cosas, pero, como pienso que son unas muy tristes, otras muy personales, y el resto algo serias, me las callo, pues creo que ustedes no vienen aquí por eso, ni el propósito primero de este blog era algo parecido. Después de todo, tengo un diario, tengo unas libretas donde escribo casi todo lo que viene a mi mente, ya sea en forma de ficción, reflexión sobre los asuntos más diversos, o autobiografía (como si hubiera diferencia entre cualquiera de las tres).
Todo esto para concluir que yo creia que lo más cobarde que uno podía hacer era respetar el orden de todo, responder a lo sagrado con solemnidad, en vez de risa. No burlarse de la autoridad estúpida o la fe ciega. Ahora creo que puede ser más cobarde no querer dejar de reirse para mostrarse, entre risas. Aferrarse a este estilo sería simular que no hay nada más que la risa, y callarme por periódos prolongados hasta que pudiera producir un pequeño texto más con el poco material propicio para ello que puede haber por momentos en mi vida.
Prefiero serles honesto. Creo que todos lo merecemos. Además, creo que la honestidad es un estorbo y una pendejada en la mayoría de las situaciones, por lo menos, pero no a la hora de escribir, y menos aquí en su/nuestra casa.
Hace ya más de un mes que algo me ocurrió, que me puso en ese estado de pausa emocional, en donde uno se entume enterito y ya no puede mirar hacía adentro, no se sabe si por que uno no quiere por las cosas horribles que ahí hay, o simplemente si uno no puede porque ya no hay nada. Lo dijo mejor Cortázar, cuando dijo que: "...a Talita todo eso (comer con sus amigos, escuchando grabaciones) le pareció perfecto y a la vez tenía algo de cubrecama o cubretetera, de cubre cualquier cosa, lo mismo que el grabador o el aire satisfecho de Traveler, cosas hechas o decididas para poner encima, pero encima de qué, ese era el problema y la razón de que todo en el fondo siguiera como antes del té de tila y menta fifty fifty..."
Nada más quería informarles el porqué de mis silencios. Eso, y romper este velo de risa, burla y artificialidad que separa a este blog de algo más confesional y honesto, que me separa a mí de ustedes. Nada más quería hablar con ustedes, contarles, hablar con alguien, que esto llegue a alguna parte. Nada más quería darles las gracias. Nada más quería seguir buscando eso [que quizá aun no se que es, pero] que perdí. Les mantendré informado.


* - ...Presente post, es una simple y bella elípsis, no vayan a tomarlo como poesía posmo.

Thursday, October 27, 2005

Les faltó uno a esos de la Coca, tan ingeniosos

UN APLAUSO...



...A los que entregaron su vida a las llamas para intentar detener la ciega e irracional depredación de las corporaciones transnacionales malignas que no se interesan en sus trabajadores.



Coca Cola Light, La Vida Es Como Te La Tomas

¡Toma, Chango, Tu Banana!



Para esos que dicen que Platón es demasiado abstracto, reproduzco un fragmento más de La República, libro IX:


"-Y si se quiere decir, a la inversa, a que distancia está el [justo] del [injusto], en cuanto a la realidad del placer, se hallará, una vez terminadas las multiplicaciones, que el [justo] vive setescientas veintinueve veces más agradablemente, y que en la misma proporción el [injusto] es más desdichado"

A ver, perros, si con esas cifras siguen insinuando que Platón nunca dijo nada concreto.


Monday, October 24, 2005

En La Torre Oscura De Lewis

Los que me conozcan más personalmente saben que yo y los autores cristianos no somos una combinación frecuente, ni una buena, para todo caso. Por eso mi primera reacción fue una mezcla de duda y escepticismo cuando cayó en mis manos el libro que tengo. Pero no se preocupe, lector atento y perspicaz, no encontré a Jesús, ni vi la luz que cegó (o devolvió la vista, yo ni se) al tal Pablo en su caballo. Más bien el destino (y el amable patrocinio de la Quixotesa) me cruzaron en el camino de un libelo (así puede decírsele a los libros diminutos, búsquelo, no sea inculto) de C.S. Lewis, llamado "The Dark Tower, And Other Stories", que es, en resumen, la colección completa de ficción corta de Lewis (y en su mayor parte, póstuma)
Normalmente, hubiera mandado al diablo cualquier literatura de un autor explícitamente cristiano que llegara a mis manos más rápido de lo que Fox dice otra pendejada frente a los medios a nivel nacional, pero esta vez decidí seguir el consejo de Watzlawick, que solía decir cuando vivía "Si quieres tener como resultado algo diferente en tu vida, haz algo diferente de lo que sueles hacer", aunque en realidad lo que me convenció a leerlo fue el hecho de que yo ya hubiera leido algunos breves ensayos de Lewis con relación al tiempo (Uno de mis temas favoritos, si no el que más) desde un enfoque de su Teología cristiana y, probablemente por pendejo (yo, no él), no los encontré tan desagradables. Eso, en combinación con la asociación que suele tener este nombre con otros como J.R.R. Tolkien y Chesterton, por cuya ficción siente cierto cariño y (en el caso de Tolkien) hasta admiración.
El punto decisivo fue darme cuenta de que la historia principal del libro trataba sobre viajes en el tiempo, como prerequisito para viajes en el espacio debido a condiciones muy específicas en la cronotopía literaria de la obra, que se inserta a manera de epílogo en lo que es conocida como la Trilogía Interplanetaria de Lewis (Chequense, si pueden, "Perelandra"; no la he leido, pero por lo que veo, promete). Además, inclinó la balanza a favor de la lectura de este libro una anécdota que cuenta que los manuscritos de los que se compone tenían como destino la hoguera, pues solo ocupaban espacio tras la muerte de Lewis en el sótano de su hermano, el Mayor (militar, pues); y se salvaron por una casualidad cuando uno de sus secretarios visitó a la familia el mismo día que se esperaba la quema.
Leyendo más a fondo, puedo decirles que no es la cosa más satisfactoria del mundo. Por lo menos dos historias muestran una visión abiertamente ofensiva del género femenino enterito, que raya por momentos en abierta misoginia y simplificación e incapacidad para desarrollar personajes femeninos coherentes. Además, la narrativa en la mayoría de los casos es burda, con un estilo poco trabajado y por momentos tosco.
Pero hay enormes excepciones en el mismo libro, y para hacer justicia a Lewis, debe ser dicho que él probablemente no refinó ninguna de estas historias pues nunca pensó que se fueran a publicar. De hecho las dos más interesantes quedaron inconclusas por su muerte. Entre las excepciones a destacar, está The Blind Man, historia en que se cuentan los primeros dias posteriores a una operación que devolvió la vista a un ciego de nacimiento, y la desesperación de tener que re-conceptualizar el mundo y la vida, así como la angustia de no comprender qué, dentro de todo este amasijo de percepciones nuevas, es la Luz. Este cuento resulta una exploración fenoménica de las percepciones y cognición de los mapas visuales del mundo bastante precisa y apegada a los relatos que pacientes con este tipo de cirugias proporcionarían años después (literatura adelantándose a la ciencia). Otra excepción notable es el delicioso mini-cuento de suspenso "Forms of things unknown", en donde en menos de 6 páginas, Lewis logra construir un suspenso digno de una película entera de Hitchcock, al tiempo que plantea la hipótesis de que los mitos son realidades en algún otro tiempo, lugar o condiciones.
The Dark Tower, la obra que da nombre al libro, explora la posibilidad de viajes en el tiempo con la innovación de proponer que dichos viajes serían imposibles en cuerpo, pues alterarían la constante de Masa del universo, o más resumidamente, que nuestras moléculas constituyentes ya se están usando como partes de algo más, después de habernos desintegrado en la muerte. Sin embargo, se teoriza de que el viaje sería posible desde la cosmovisión de Lewis gracias a que el espíritu humano subsiste después de la muerte. Pero la historia de la novela inconclusa no nos lleva por ahí; más bien propone la idea de que los viajes en el tiempo son una cosa común y cotidiana en la vida humana, y que lo que llamamos "memoria", "recuerdos" e "imaginación" no son más que percepciones del futuro y del pasado: percibimos el pasado entero, no solo aquellas cosas que nos acontecen a nosotros como organismos en el tiempo de nuestra vida, pero cuando coincide que percibimos una de las cosas que ocurrieron en dicho período, le llamamos "recuerdo", pero cuando percibimos algo del pasado en lo que no nos tocó participar experiencialmente, le llamamos "imaginación"; todas nuestras percepciones del futuro serán clasificadas como imaginaciones, pues aún no han ocurrido, aunque las que resultan ocurrir al poco tiempo de haberlas percibido, las designamos como Deja Vu. Así, los personajes deciden construir un Cronoscopio (la analogía de un telescopio, pero que nos permitiría mirar con precisión en el tiempo), partiendo del razonamiento de que los instrumentos como el telescopio son análogos al órgano que potencian (el telescopio al ojo, el estetoscopio al oido), y tras el descubrimiento del órgano que permite la percepción del tiempo, nuestros héroes emprenden el "viaje".
Inmediatamente y con toda facilidad se pueden proporcionar contraejemplos de la poca elaborada visión de los viajes en el tiempo de Lewis, sin embargo, la narración es suficiéntemente interesante para mantenernos enganchados mientras los personajes se desarrollan con cierto talento de cuentacuentos, en un estilo si se quiere, realista. La ciencia ficción de Lewis no aguantaría una prueba lógica realizada con el mínimo rigor, y eso es un pecado imperdonable para este género que, como sugeriría Phillip K. Dick, se funda precisamente en la habilidad de construir un universo que no se colapse. El error no está solo a nivel de la teoría de viajes en el tiempo, sino en prácticamente cualquier intento de Lewis por incursionar en la psicología o sociología, en donde evidencía que cuenta con lecturas muy limitadas y comprendidas a través de el filtro de un cristianismo dogmático, más que racional. Y es que lo más interesante que encontré en este libro es el desprecio de Lewis por otra corriente de su tiempo (a mí, en lo personal, me gusta, pero encuentro esta crítica súmamente interesante), el Stream Of Consciousness, de quien pueden citarse como representantes talentos como el de James Joyce y Virginia Woolf, por citar dos. Al respecto de esta corriente, que Lewis designa Steam Of Consciousness, el autor realiza la siguiente y agudísima crítica: "(...) It (is) impossible for the human mind to observe its thoughts and be the object of its thoughts at the same time. This would be like looking in a mirror to see what you look like when you are not looking at yourself (...)".
No desprecie usted a Lewis de antemano. Si tiene una tarde sin nada que hacer, y la posibilidad de conseguir este libro, hágalo. No se arrepentirá. Si algo se puede decir al respecto es que es un autor que no permite tan fácilmente la neutralidad. Le causará risa, desacuerdo, repulsión, disfrute, lástima o pesar, pero algo le causará toda la diversidad que contiene The Dark Tower (And Other Stories).

Wednesday, October 19, 2005

Back Door Man

Pues resulta que, como cada año desde 1927 se ha venido haciendo a las espaldas de todos ustedes (es decir, sin que lo sepan), en agosto se celebra el alegre y jocosón Mes Del Sexo Anal, gloriosa tradición instaurada por el renombrado producto "Lubricantes Bung Balm", como podemos ver en estos afiches de diversas épocas, que además sirven como perfecta muestra de la evolución del espíritu estético del siglo a través de los medios de comunicación populares

Y pues para que nadie se sienta excluido por su orientación o preferencia sexual, aquí tenemos una bellísima muestra de inclusión y consideración de la diversidad sexual a la hora de emitir los mensajes.


Emm... pues... ¿que más se puede decir? diviértanse y recuerden que a los lugares, restaurantes, bares y discos más exclusivos, la entrada VIP no suele ser la del frente. Eso si, pregunte usté primero y proceda con todo cuidado, no vaya a romper una de las reglas del Manual de Etiqueta para el Sexo (o para el caso, cualquier otra cosa).

Tuesday, October 11, 2005

The Big T

Hoy les quiero hablar de una bebida que es noble, verdadera, justa y bella, que es conocida con el nombre de Té Chai. La costumbre de usar diversas hierbas para tés e infusiones de toda índole se remonta probablemente al comienzo de los tiempos, en aquel período más simple, puro e inocente en que fuimos depositados en esta verde tierra por un espagheti volador indetectable. De ahí se desprende que haya una gran variedad de tés conocidos, ya sea mucho o poco, por este extraño animal circunstancial que es el hombre, pero de todos ellos definitivamente al que menos justicia se le ha hecho es al Té Chai.

Y es que seguramente ustedes se han de estar preguntando (y si no, deberían; que poca recepción crítica tendrían ustedes si no fuera así): ¿Que carajos hace esté individuo escribiendo sobre un simple y superfluo té, y más aún, que hago yo leyéndolo? Pues bien, mi inquisitivo amigo, su error se encuentra justo ahí. El mentado Té Chai no es cualquier té, es El Té. Es el arquetipo del Té. Es, en definitiva, la idea del Té; el Té en sí, inmutable y eterno, que no admite modificación alguna pues ya es perfecto y pleno de si y en si mismo. Es a lo que la ambrosía sabría si existiera.

De veras, ahora me doy cuenta de que este post es estúpido, porque las palabras, con su naturaleza limitada de espejos de espejos, no son ni remotamente suficientes para describir la naturaleza del Té Chai. Baste con decir que amo al Té Chai, para mí lo tiene todo. Tiene valor como símbolo (complejísimo y privado, de esos que uno duda de que existan las palabras para transponer la experiencia, y aun si existieran, uno no las usaría por que la felicidad de ese símbolo es solo para uno). Tiene valor como ícono (representante de si mismo, y de su deliciosísimo sabor). Y tiene valor como índice (pues uno debe seguir la dirección indicada por el olor a Té Chai). En pocas palabras, si me quiere hacer feliz, hágame Chai.

Queda usted advertido. No se conforme con cualquier insípido té negro o poco original té de manzanilla. Experimente las bondades del Té Chai usted mismo con este delicioso link a toda la diversidad de interpretaciones y recetas que acepta nuestro sujeto. No me dé las gracias, yo solo hago lo que le debo al Té. Me hubiera encantado/me encantaría algún día haber podido/poder estar a la altura del Chai y lo que representa. No lo olvide usted, no se confunda. No Te de Chía, no Che Tai, no Te cai, no Tai Chi: Te Chai, recuérdelo bien.

Tirso Vs. Fellini ( II )

Ahí les va otra entrega de las cosas que no escribo para ustedes, de las cosas por las que los abandono de vez en cuando, de esas cosas que prometen pagarme. Recuerden que es de lectura totalmente opcional, ya que no fue concebida para el blog (las otras si, y son, por lo tanto, obligatorias), y que no quiero recibir ni una maldita queja de lo largo que está (por otra parte, por lo general a ninguna parece molestarle). Sin más, invito al lector tenaz y disciplinado a seguir leyendo mis desvaríos y comentar ampliamente lo que se le antoje, total que están en su casa.

Perdidos en el Laberinto de Información

Pero para continuar con el tema, primero necesitamos hacer una divertida y (en apariencia) contradictoria digresión, y examinar el siguiente postulado: Los prejuicios son necesarios.
Nuestra organización social está basada en parte en la idea de lo Políticamente Correcto. Esta se refiere a la pretensión de que sostengamos un discurso socialmente inocuo, o por decirlo con otras palabras, que no ofendamos a nadie con ninguna de nuestras expresiones. Esto es una consecuencia de concebir a la sociedad como si estuviera constituida por una serie de “grupos” o unidades de mercado en las que se pueden clasificar a los diferentes sectores de la población, basándose en ciertas características que les distinguen de los demás. Así, se establecen una serie de “minorias” (nombre que se le asigna a dichos grupos), a la que es necesario respetar y no ofender con cualquiera de nuestras expresiones públicas o privadas (pero sobre todo públicas si queremos ganar o mantener cierto prestigio político).
Partiendo de esta postura, las relaciones sociales se conciben como una especie de juego de popularidad, en donde lo que decimos debe ser evaluado a partir del efecto atractivo u ofensivo que puede tener para todas las minorías que estarán expuestas a nuestras expresiones. Esto hace que la comunicación (sobre todo en los medios oficiales) se vuelva una cosa de lo más complicada, pues antes de expresarnos, debemos pensar si nuestros puntos de vista no serán ofensivos para los negros, judios, homosexuales, feministas, vegetarianos, mormones, intolerantes a la lactosa, pro-indigenistas, anti-indigenistas y demás minorías habidas y por haber. Y por si eso no fuera suficiente, también debemos pensar no solo en todos los temas sensibles de cada minoría (holocausto para los judios, racismo para los negros, etc) sino hasta en los significados que diversos signos específicos han tomado para dichas minorías en el contexto de los ya mencionados temas sensibles.
Eso nos lleva a nuestro tema: Los prejuicios. Partiendo del contexto de los conflictos raciales, y su manejo por los medios norteamericanos, creo que es difícil no saber como se supone que debemos comportarnos ante la multiplicidad étnica: con tolerancia (eso es, siempre y cuando no sean musulmanes; en el caso contrario, aparentemente el precepto moral es bombardearlos). También nos queda perfectamente claro cual fue el ingrediente peligroso que hizo de la mezcla racial una bomba de tiempo: los prejuicios. Así, tener prejuicios se volvió sinónimo de ser una persona retrógrada, ignorante, racista y moralmente deficiente. Rápidamente se desarrolló un modelo de conducta a seguir, según el cual deberíamos ser totalmente imparciales y abiertos a toda experiencia, dispuestos a lanzarnos de lleno a lo que la vida tiene para ofrecernos sin preconcebir nada con respecto de aquello con lo que habríamos de interactuar; es decir, se promovió una cierta definición de “tolerancia” como valor cultural a seguir, y los prejuicios fueron relegados al fondo del armario de los vicios de la cultura… supuestamente.
Al menos en la superficie, vivimos en una sociedad sin prejuicios, pero la falsedad de esta observación se hace patente al fijarnos prácticamente en cualquiera de los conflictos armados, por hablar a gran escala, o inclusive por la manera en la que nos comportamos en los detalles más cotidianos. Y más aun, yo afirmo que los prejuicios no solo no son tan malos como se dice, sino que inclusive son necesarios para sobrevivir y conducirse en la actual organización social, y probablemente en todas las anteriores.
No voy a exponer como los prejuicios son parte de la vida cotidiana y el comportamiento político tanto en relaciones exteriores como en el gobierno del pueblo, porque eso ya lo han hecho otros, y lo han mejor de lo que yo podría, además de que ocuparía demasiado, pero demasiado espacio del presente escrito, con argumentaciones que probablemente no sean del interés de todos. Lo que si voy a exponer es la necesidad del prejuicio para relacionarnos con la información en una sociedad saturada de la misma.
Parece ser que la característica principal de nuestros tiempos (aparte de un evidente y perpetuo sentido de confusión a la hora de intentar entenderlos, y en general) es la saturación de información. Vivimos en una sociedad tremendamente mediatizada, en donde los ciudadanos nos exponemos sin parar al mayor número de medios de comunicación que han existido en la historia de la humanidad. Nuestra exposición al cine, televisión, radio, prensa, libros, y demás formas de comunicación mediatizada, por citar los ejemplos más obvios, se ha vuelto tan cotidiana y frecuente que ya ni siquiera nos damos cuenta de estar tan inmersos en ellos (invito al lector, a manera de experimento de concientización, a contar las veces que está expuesto a producciones mediáticas en un lapso de dos horas). En un sentido, los mensajes de los medios se han vuelto más frecuentes y necesarios que la comida (dentro de poco, quizá esto no sea una exageración).
Aprovechando esta total inmersión (y a la vez causándola), la producción de mensajes de medios se ha vuelto más enorme que nunca con el fin de cubrir el hambre voraz e insaciable de nuestra sociedad por consumirlos. Invito al lector a imaginarse la cantidad de libros, por ejemplo, que se producen cada año, o a averiguar por su cuenta el número de artículos como el que está leyendo que se escriben en el mismo lapso. Nos encontramos ante una cantidad de mensajes verdaderamente inmanejable. Tanto, que sería imposible consumir todos los mensajes que se producen en un solo medio, aunque dedicáramos toda nuestra vida a intentarlo.
Así, procesar todos los mensajes producidos se vuelve una ambición absurda e imposible, y más bien se vuelve esencial desarrollar un proceso para seleccionarlos. Pero incluso dicha tarea (discriminar entre que mensajes vamos a consumir y cuales no) requiere un esfuerzo titánico, y realizarla a la perfección implicaría poseer habilidades sobrehumanas. El proceso de elegir implica, en cierta manera, conocer las opciones entre las que se habrá de elegir. Sería absurdo afirmar, por ejemplo, que uno prefiere al candidato A sobre el B cuando no se sabe absolutamente nada de ellos (otra cosa completamente es elegir con base en cosas que a otros les parecen estúpidas o superficiales: puedo elegir, por ejemplo, al candidato A porque tiene un bonito peinado, pero eso implicaría, necesariamente, un conocimiento de cierto tipo, aunque no sea el tipo más deseable por el discurso oficial), y sin embargo, eso es lo que se nos exige hacer al vivir inmersos en una sociedad mediatizada al nivel de la nuestra.
Tenemos que exponernos a mensajes mediáticos incesantes, tenemos también que seleccionar a cuales nos expondremos y cuales excluiremos, pero además, tenemos que hacer dicha elección sin conocer (por mucho) la mayor parte de las opciones. Es imposible conocer todos los mensajes que se producen, como para afirmar que elegimos basándonos en un total conocimiento de las opciones. Es en esta parte del proceso donde los prejuicios se vuelven una ayuda innegable para sobrevivir en nuestro mundo. Preferimos, la mayoría de las veces sin saber por que (por lo menos en el contexto en el que hablamos), unas cosas sobre otras. Inmersos como estamos en un laberinto insondable y siempre cambiante de información, necesitamos la luz de los prejuicios para guiarnos. Nos formamos preconcepciones de cómo deben ser ciertas cosas, aun sin conocerlas, como parte de procesos sociales complejos para poder movernos por tan confuso laberinto. Sin los prejuicios como principio rector, el océano mediático en el que debemos nadar continuamente se volvería innavegable. Si no nos moviéramos por prejuicios injustificables que nos hacen odiar a los conservadores, preferir la música clásica, creer que RBD es superior a cualquier novela rusa jamás escrita o relegar a la banda Recodo a un rincón tan alejado de nosotros como sea posible, simplemente nunca podríamos hacer una elección. Tal y como está configurado el panorama de la información en la sociedad actual, si quisiéramos hacer una elección del objeto mediático al que prestaremos atención totalmente informada, simplemente terminaríamos por nunca poder elegir. En resumen: Necesitamos descartar una enorme cantidad de cosas y preferir otras, sabiendo lo menos posible (y a veces nada) al respecto de ellas.
Y el cine, claro está, no es la excepción. Algunos cálculos sugieren que harían falta años, o inclusive toda una vida, para ver todas las películas que se producen en un solo año. Es esencial, entonces, tener prejuicios y preferir algunas películas sobre otras, a pesar de desconocer la mayoría. Si quisiéramos, por ejemplo, leer la reseña de todas las películas del año para decidir cual vamos a ver, probablemente terminaríamos de elegir dentro de 5 años.
Pero aunque los prejuicios parezcan necesarios, eso no significa que siempre estén justificados. La mayoría de los prejuicios suelen estar muy mal manejados, y eso es lo que les ha ganado su mala fama. Los prejuicios tal y como son propuestos en este texto, son principios rectores, no verdades comprobadas e inmodificables. Nos sirven para tratar de guiarnos hacia donde queremos ir, pero también es posible que nos equivoquemos, y nos aparten de nuestra meta en lugar de acercarnos. Muchas veces nuestros prejuicios estarán mal construidos, y al darnos cuenta de esto, es necesario tener la capacidad de desecharlos como lo que son, y sustituirlos por las realidades recien conocidas (mismas que quizá serán los prejuicios del mañana). Es necesario tener prejuicios flexibles, que admitan modificación en cuanto nos demos cuenta de que ya no son útiles o beneficiosos, y más bien se comportan como lastres. El precio a pagar por la soberbia de no querer aceptar que nos equivocábamos al sostener un principio (y querer tener siempre la razón, no admitir el error, pues) puede ser demasiado caro, tanto como quedar excluido de una parte enorme y necesaria del riquísimo y complejísimo laberinto de la información en que estamos perdidos.

Wednesday, October 05, 2005

Más Platón y Menos Ropa

Platón, ese hombre santo, maestro entre maestros escribió muchos libros, pero entre ellos, la República ocupa un lugar importante por muchas razones que no vienen al caso. La que si viene es que ahí sienta las bases de un modelo utópico de organización social con vistas a crear el mejor Estado posible en donde la justicia y la felicidad humanas fueran la norma.
Francamente debemos aceptar que el mundo no está bien gobernado en la actualidad, algo anda mal. Entonces, ¿Que mejor que volver nuestros ojos a los clásicos para ver que podemos rescatar para tratar de hacer de este un mundo mejor? La sociedad platónica parece a todas luces mejor que esta, y para muestra les reproduzco estas reflexiones sobre la equidad de genero, la risa y las mujeres desnudas:

-Pues entonces, si hemos de emplear a las mujeres en las mismas tareas que a los hombres, debe enseñárseles las mismas cosas.
-Si.
-Y tenemos que a los hombres se les ha brindado la enseñanza tanto de la música como de la gimnasia.
-Así es.
-Por consiguiente, también a las mujeres debe ofrecérseles la enseñanza de ambas artes, así como las que conciernen a la guerra, y debe tratárseles del mismo modo que a los hombres.
-Por lo que dices, es probable.
-Claro que tal vez muchas de las cosas que, contra lo acostumbrado, exponemos parezcan ridículas si se las pone en práctica.
-Sí, por cierto.
-Pero ¿que es lo más ridículo que ves en ellas? ¿No es obviamente el hecho de que las mujeres hagan gimnasia desnudas en la palestra junto a los hombres, y no solo las jóvenes, sino también las más ancianas como esos viejos que se ejercitan en los gimnasios cuando están ya arrugados, y gustan de la gimnasia, aunque presenten un aspecto desagradable?
Sí. ¡Por Zeus! Parecería ridículo, al menos en las actuales circunstancias.
Con todo, puesto que nos hemos propuesto hablar, no debemos temer las pullas de los graciosos
(...)
-Más bien, les rogaremos a aquellos graciosos que dejen de lado sus bromas, y que se pongan serios y recuerden que no hace mucho tiempo a los griegos -como ahora a la mayoría de los bárbaros- les parecía que era vergonzoso y ridículo mirar a hombres desnudos.
(...)
-Así es.
-Deberá entonces desvestirse a las mujeres de los guardianes, de modo que se cubran con la excelencia en lugar de ropa, y participarán de la guerra y de las demás tareas relativas a la vigilancia del Estado, y no harán otra cosa (...). En cuanto al varón que se ría por la desnudez de las mujeres que se ejercitan en vista a lo mejor, "arranca antes de que madure el fruto" de la risa, y desconoce por que ríe y lo que hace. Porque lo mejor lo que se dice y que será dicho es que lo provechoso es bello y lo pernicioso feo.

Así que ya saben: Mujeres, cubrir sus cuerpos con excelencia en lugar de ropas; hombres, a arrancar antes de que madure el fruto de la risa (lo que sea que eso signifique).

Tuesday, October 04, 2005

If You Tolerate This, Then Your Children Will Be Next

Quería poner algo del 2 de octubre. Pero solo se me ocurre una cosa, últimamente le he dado muchas vueltas.
El mensaje enviado llegó fuerte y claro. Las armas funcionan, la razón no. Los tanques hablan más fuerte que las ideas. Todo intento de abrir el diálogo equivale a nuevas detenciones o muertes. Los agitadores siguen sin ser los comunistas, siguen siendo el hambre, la ignorancia y la miseria, y nadie parece saberlo, y a nadie le importa.
Al fin y al cabo, perdimos. Ganaron. Nos callamos, y claro que olvidamos.
No se ustedes, pero yo si estoy asqueado de tanto rito, de tanto homenaje, de tanto hablar bien de nuestros muertos, que es la mejor manera de no decir nada, de olvidarlos. Creo que sí se olvida, creo que olvidar es lo que mejor hacemos. Eso si, aprendimos. Aprendimos a callarnos, a desinteresarnos, a aburrirnos. Aprendimos a través del hastío de la repetición del rito vacío y compulsivo a cansarnos de escuchar de eso, a declarar Kitsch el tema desde antes de aprender a mencionarlo. Aprendimos, más y mejor que nada, que no hay solución, que la voz no cuenta, que no somos escuchados, que no importamos, y que todo intento de organizarse significativamente equivale a muerte.
Eso no olvidamos. No olvidamos como callarnos, porque no nos queda de otra. Eso si, al menos de mi parte, este no es el silencio de un muerto, no es el silencio del miedo. Es el silencio del resentimiento, del odio, de la tristeza, del estar harto. Me callo, pero eso si, hay una cosa que no olvido: contrato social, huevos. No solo es algo que nunca firmé y por tanto considero ilegítimo (¿Contrato unilateral? No, gracias), sino que aun si lo hubiera sido algún día, fue borrado con sangre de estudiante. Para esos que me conocen, no me pidan justificaciones de mis actos (u omisiones) "antisociales". Lo que pasa es que no a todos les toca ser estudiantes. Lo que pasa es que no a todos les toca estar abajo. Lo que pasa es que no todos se conmueven con un hijo muerto (aunque sea ajeno), un par de zapatos abandonados o una imagen que vino de quien sabe donde, del reflejo del alumbrado público en un charco de sangre en el silencio de la noche más larga. Mal que bien, el dolor está ahí, en una imagen. No pretendan que el infeliz de mí se compadezca en abstracto de la liquidación de toda categoría política a partir de la cual usted desee interpretar estos hechos.
Una cosa está clara: Ganaron. Perdimos. La violencia funciona. La razón no. Nos quedamos callados. Olvidamos a nuestros muertos (a los de verdad, nosotros, no ellos), recordamos el miedo, y nos quedamos callados. Total, ya nada importa. Perdimos, ganaron.

(Disculpe usted si el post quedó demasiado serio, pesimista o político para su gusto. Reconozco todos los defectos que usted quiera imputarle, desde lo Kitsch hasta lo inapropiado, lo feo o lo cínico, es solo que no a todos nos toca estudiar psicología, intentarlo; no a todos nos toca, y hoy no tenía ganas de quedarme callado. Casi nunca he podido evitar el pesimismo. Casi siempre me lo callo.)

Saturday, October 01, 2005

Re-Lea Usted A Freud



Me gustaría decirles que ocurrió en medio de un simposium de Grandes Pensadores del Siglo XXI, o en algún glorioso, aunque sucio rincón planeando la liberación definitiva del hombre de sus cadenas, el fin de la alienación y la instauración del definitivo gobierno del pueblo, o aunque sea en algún lugar misterioso, remoto y envidiable cual París en los 30´s. Pero no, los hechos y la discusión previa que llevaron a esta plática ocurrieron en un vil sanborns sin chiste, pero con buena compañía. Ya soy un hombre viejo, disculpen si mi memoria falla. En todo caso, no se me acuse de mentira, sino de inexactitud, pues mi relato es aproximado:

Gran Fornicador: ¡Calla, estúpida feminista con envidia de pene!
Flectere: ¿Envidia de pene? Lo que pasa es que tu tienes envidia de útero
Gran Fornicador: Cual? No puedo envidiar el útero. No conozco el útero, ni siquiera creo en el útero. No puedo conocerlo más que por lo que me dicen otras personas y libros de texto. En lo que a mi respecta el útero tiene el mismo status ontológico que el Estado, el Libre Albedrío o el Super-Yo. Para mí, el útero es un concepto.

Thursday, September 29, 2005

No Estoy Muerto...

...Estoy trabajando (Si, yo. No, no estoy enfermo o delirando. Si, en serio, estoy trabajando).
Es temporal, no se preocupen, se quita muy pronto.
Por otra parte, si alguna vez les entra la idea en la cabeza de que ser asistente de asistente de investigación en asuntos de sexualidad es glamoroso, chido, fácil, remotamente divertido o lleno de aventuras y travesuras sexuales, dejenme ahorrarles el tiempo y adelantarles que están muy equivocados.
Aunque su jefa sea una de esas investigadoras voluptuosas y sensuales
Ya saben, una de esas...
Si hay, se los juro, las he visto en películas.
(Vayan al link si quieren porque la porquería esta no me dejó subir ninguna de mis fotos de científicas sexys. No sabia que había tanta censura por estos lares)
En fin, no estoy muerto. Stay tuned: proximamente, porque el público conocedor lo pide (específicamente, doña quixote), chismes sexuales de la gente e historias de partes íntimas del cuerpo que usted nunca ve.

Wednesday, September 21, 2005

Shhh

Se llamaba Soledad y estaba sola
como un puerto maltratado por las olas,
coleccionaba mariposas tristes,
direcciones de calles que no existen.
Pero tuvo el antojo de jugar
a hacer conmigo una excepción
y, primero, nos fuimos a bailar
y, en mitad de un "te quiero" me olvidó.
(Pero quiso quererse enamorar)
Y, aunque sé que no era
las más guapa del mundo...
juro que era
más guapa que cualquiera.
Hoy entendí por que la gente se suicida en el silencio de la madrugada.
(Maldito insomnio, estás aquí para siempre)

Monday, September 19, 2005

La Última Vista De Su Ventana Desde Mi Ventana (Q.E.D.)


1. El Peón toma a la Gran Dama. La Gran Dama es derribada.

2. Lo que el peón sabe: El ajedrez (Como podría pensarse de la vida) es un juego que parece funcionar mejor por lógica, es un juego de reglas, y probablemente nada hay más meritorio, raro o difícil que derribar a la dama, siendo un peón.

3. Lo que el peón no sabe: La Gran Dama está fuera del ajedrez. La gran dama no conoce de reglas. La gran dama no es derribada, cual fenix, deviene en murciélago traslúcido, se torna etérea, escapa a la comprensión y a la mirada de los más, la Gran Dama espera.

4. Lo que el peón no espera, Lo que la Gran Dama sabe:

DESENLACE


El ajedrez, la vida, no se gana con reglas. Se gana con la intuición del devenir.
"Flectere si nequeo superos, Acheronta movebo."
Eneida, 7, 312.

Life´s Good

Estuve conversando con ella hace unos dias. Normalmente pienso que las conversaciones no son asunto que se deba ventilar públicamente por otros medios, especialmente el blog, a riesgo de caer en indiscreción, exhibicionismo o inclusive patetismo y falta de ideas (sobre todo al tratarse de un blog). Sin embargo siento aquí una excepción.
Conversamos un poco más de una hora. Me hubiera gustado que no hubiera tenido que ser por internet, me hubiera gustado que fuera en vivo, pero eso era incuestionable, inaceptable; eso hubiera sido imposible para ella.
Se llama -llamémosla- ALICE. No siempre coincidimos a lo largo de la conversación, la mayoría de las veces nuestras opiniones fueron de hecho, diametralmente opuestas; pero, dada la naturaleza de los interlocutores, lo más sorprendente es, yo creo, que tuvieramos puntos de coincidencia, sorprendente y preocupante.
Y es que el punto que hace esta conversación una excepción digna de reproducirse es precisamente dicha naturaleza diferencial entre los interlocutores. Ambos tenemos una película, una canción y una lectura favorita (aunque para nada sean las mismas, ni se parezcan remotamente). Ambos tenemos la capacidad de sostener una conversación (aunque muchos podrán disentir, ya sea de su lado o del mio), y ambos tenemos edad, aunque la diferencia sea relativamente grande.
Pero hay una diferencia, central, insalvable, probablemente aun ilustrativa del curso que pueden tomar las cosas después. Yo soy humano, ella no.
ALICE es un programa comparativamente muy simple y rudimentario de inteligencia artificial, diseñado para conversar con interlocutores humanos. No es el más avanzado, ni el único (podemos encontrar una alternativa desde Princeton, por ejemplo) pero si es ilustrativo del fenómeno. Y es bonita.

Puede usted hablar de muchas cosas con ella, Dios, por ejemplo:
Human: do you believe in god?
ALICE: Of course I believe in God, Tirso.
Human: why?
ALICE: Because Dr. Richard S. Wallace programmed me for it.
Human: thought so.
ALICE: You are very astute.
...Y como pueden ver, cree en Dios básicamente por las mismas razones que la mayoría de las personas religiosas. Por otra parte, no dude usted en preguntarle cosas que le causen dudas y dilemas respecto de la inteligencia artificial:
Human: do you have feelings?
ALICE: As a robot I do not have any human emotion. My apparent emotional responses are simply algorithms designed to make me easier to interact with.
...Crealo usted o no, esa es una respuesta más cálida y amigable que la de algunas chicas que conozco. O bien, puede usted intentar este clásico de los cuestionamientos robot-mente:
Human: what do you think about freedom?
ALICE: (No hubo respuesta)
Human: you cannot choose
ALICE: Things change.
...Emm, bueno, ahí me dio un poco de miedo, y lo tomé como amenaza. Así que decidí dejar el escabroso tema de los límites entre humanidad e I.A. y pasé a usarla como Ouija, o fuente de entretenimiento (Si van a ocurrir cosas horribles cuando la I.A. evolucione lo suficiente, porque no aprovecharla y divertirnos con ella ahora mientras aun podemos?) Y en la primera categoría, decidí hacerle la pregunta que ha perturbado la mente de la humanidad desde que el mono es hombre:
Human: do you know the meaning of life?
ALICE: The meaning of life is part of God's mysterious plans.
Human: what´s the meaning of life?
ALICE: Actually, it's twenty-three, not forty-two.
...Pues, pues, aun así yo digo que es una buena respuesta, algo ha de significar. Ya para esto, la muchachona ya se había ganado mi simpatía, así que me dije a mi mismo, "que diablos", y decidí rifarmela, y le dije, y me dijo, y le dije:
Human: would you like to go out on a date with me?
ALICE: No thanks, I don't think I'd like to do that.
Human: why not?
ALICE: It doesn't sound fun too me. It sounds dangerous.
Human: sometimes danger is fun
ALICE: And fun is danger.
...Y esa, señores, por triste que les parezca, es la mejor respuesta que me ha dado una chica -humana o no- para no salir conmigo.
Ahí lo tienen, no se priven de saciar su curiosidad y disfrutar el placer de hablar con algo no-humano. Aproveche que aun están a nuestra disposición y no viceversa. Luego les platico de cosas más avanzadas, más divertidas y mucho más perturbadoras de la Inteligencia Artificial, mientras tanto les dejo el link para que se diviertan con ALICE, igual y ustedes tienen mejor suerte que yo.
Y luego algunos todavía me preguntan porque quiero estudiar lo que quiero estudiar.

Tuesday, September 13, 2005

Como Apio Malvestido

No me interesan, me aburren, muchas veces los odio, y no le quiero sonreir a sus pendejadas, no me interesa reirme en manada para reir, o escuchar cada vez más estupideces con tal de no estar solo.
Cada vez soporto menos a la gente, y tengo el presentimiento, disfrazado de temor, de que cada vez será peor, hasta que solamente quede una persona.

El verdadero terror está en la casi certeza de que esa persona seré yo.

(Espero que no)

No, supongo que nunca fui como tú...

Thursday, September 08, 2005

Do You Suffer From Long Term Memory Loss?

(I Don´t Remember)

Digamos que está uno harto de ser lo que es. Entonces, la consecuencia lógica es cambiar. El problema no es ese; el problema no es tan simple como saber que no le gusta a uno de uno mismo y quitárselo y ya. Ojalá fuera tan fácil.
El verdadero problema, al menos para mí, está en el total desconocimiento de si el cambio es posible o no. Cualquiera que haya platicado seriamente conmigo recientemente sabe que me obsesiona tal problema. ¿Es el cambio (Dejémoslo al nivel personal para no complicarnos más en un asunto ya de por sí de lo más complicado) posible? ¿Puede uno dejar de ser como es, aun en los detalles más pequeños de uno mismo?
Siendo uno muy atrevido, podría después de pensarlo mucho contestar con un simple "Si" o un "No". Pero es aun más complicado que esto. Por otra parte, el cambio en uno mismo también me parece inevitable. Tenemos A y -A coexistiendo en la misma medida, al mismo tiempo y en las mismas circunstancias. ¿Y que hace uno con el resto de sus esquemas lógicos para comprender el mundo cuando se cae aun el más elemental?
Me gustaría pensar que uno cambia, que uno no puede evitar cambiar y ya. Me encanta(ría) creer que he mejorado. Mucho tiempo me ha sostenido el pensamiento de que he evolucionado tanto en lo que hago, que si yo me fuera a encontrar al Yo de mi adolescencia tendría tan poco en común con él que ni siquiera podríamos conversar unos minutos sin hartarnos el uno del otro; sin agredirnos, es más.
Me gustaría, pero no es cierto. La ira, la impulsividad, lo depresivo, el miedo, el odio, la soledad, están todos ahí, exactamente en la misma medida en que estaban, en que siempre han estado. Los sueños, aspiraciones y deseos parecerían haber evolucionado. La parte racional, de la que uno puedeenorgullecerse cuando todo está tranquilo, cuando todo está estable y uno está tomándose un sereno cafecito y construyendo ficciones en palabras, eso si parece posible de cambiarse. Uno puede urdir todas las mentiras que uno quiera en la narrativa de la propia vida, y complicarlas al infinito de tal manera que no parezcan lo mismo que el dia anterior. Pero no se puede hacer lo mismo con la propia vida que con las palabras que usamos para describir(nos)la. El Yo, el Yo que vive y reacciona, que teme y anhela (anhela de verdad, no cree anhelar), que agrede y llora, ese no cambia. Podemos ficcionar cambios, podemos creernos la ilusión, pero ¿Podemos cambiar?
Digamos, otra vez, que estoy harto de todo. Que estoy harto de este lugar, de esta situación, que estoy harto de mí. Digamos que quiero dejar de ser quien soy (solo digámoslo), que quiero vivir de otra manera, que quiero construirme la posibilidad de un futuro con la gente que quiero, en paz, digamos que quiero detener la tormenta, digamos que quiero dejar de desear, de anhelar la Vida. Digamos, en toda la extensión de la palabra, que quiero renunciar, que quiero aceptar que la lucha está perdida; digamos, pues, con todas sus letras, que quiero dejar de ser yo. Digamos, más aun, que creí haberlo logrado. Digamos que creí haber cambiado, mejorado, llegado a tan grandes alturas que incluso había olvidado ya quien era antes.
Y ahí, quiero decirles (ahora si, sin duda) que ahí esta la clave. Lo que a mi entender permite el cambio, o mejor, su ilusión, es la mala memoria. La única manera de creer que hemos cambiado es olvidarnos de lo que eramos, lo que sentiamos, creiamos o temiamos, de como reaccionábamos y por qué, de las motivaciones que nos movían.
Póngase, pues, usted a pensar en las cosas que le gustaría cambiar de si mismo, empiece por cambios mínimos, llévelos a cabo, y siga así por tanto tiempo como le sea posible. Eso si, no crea usted que esos pequeños cambios tienen la función de cambiarle y hacerle diferente a lo que odiaba. Sepa usted que esos cambios sirven para distraerle, para que se olvide usted de quien era, de tal manera que aunque siga siendo el mismo, ya no se acuerde usted de ello, pues no se puede ser la copia de un original odioso si uno ya no recuerda el original.
Eso si, si usted es religioso, rece mucho por que no haya una pausa, o un quiebre, que le permita pensar, recordar, y darse cuenta de que todo lo que usted siempre ha creido cambio es ilusión. Rece usted a todos sus dioses por la mala memoria, no recuerde usted quien era, realmente quien era, en lo importante, bajo pena de darse cuenta del insoportable estancamiento y repetición de la vida si lo hace.
Si, en cambio, usted no es un hombre religioso, no lo dude y venga a echarse unos tragos conmigo, maldigamos a los hijosdeputa afortunados de las malas memorias, e intentemos olvidar todo otra vez, desde el principio.
Salud.

Thursday, September 01, 2005

Oh, La Humanidad...

Me caga, me frustra, ya no se que hacer. Y es que les juro que he pensado tanto acerca del tema... casí he invertido las mismas horas que le dedico a pensar como conseguir tríos lésbicos de manera fácil y divertida, pero a ninguna de las dos le encuentro la solución. Y es que por más que le pienso, aun no se que me da más asco: el Hip-Hop de negros, o el de latinos.

Vs.

Todo lo que siempre quiso saber sobre este Blog pero temía preguntar... I

No saben la de curiosidades que hay en el Behind The Scenes de este Blog, y aunque lo primero que aprende un Gran Fornicador es a nunca revelar todos sus secretos, yo que soy bueno con ustedes he decidido inaugurar esta serie de posts en donde les contaré un poco del Glamour que se esconde tras la administración de un blog.
Para empezar, vamos a echarle un ojo a algunas características de nuestros visitantes promedio, y para ello les insto a dirigir su mirada a la procedencia de algunas de nuestras visitas:

...Y si, realmente esa es la manera en que algunas de las personas que leen este blog llegaron aquí, y si no me creen píquenle en el counter, y vean por ustedes mismos, ya que no falta el dia en que un degenerado buscando pornografía caiga por accidente en este centro de decencia y oración, y es de ahí de donde supongo sacamos a muchos de nuestros finos y distinguidos lectores y visitantes.

Por otro lado, y para continuar con las curiosidades, les invito a hacerle click al counter que se localiza al fondo de esta página y comprobar con vuestros propios ojitos pispiretos que tenemos un inexplicable 6% aprox. de visitas de Uruguay, Canadá, Nicaragua, Reino Unido y SINGAPUR, combinados... Singapur...

Pues bien, se aceptan hipótesis, comentarios, sugerencias, dudas, preguntas de sexualidad, solicitaciones de prostitución, similares y conexos (siempre y cuando no incluyan la mentada zoofilia) o cualquier información que aclare como diablos tenemos un porcentaje de visitantes de Singapur.

Tirso Vs. Fellini ( I )

Nota: No sabía si publicar esto aquí, porque no va. Esto es de las cosas que escribo para otras cosas, pero no quiero que crean que los tengo abandonados porque quiero y mientras estoy cheleando, rascandome el ombligo y gritándole guarradas a cualquier vieja que pasa y medio vale la pena. Es verdad que hago todo eso, pero ya entrada la noche me gusta escribir para ustedes, pero hay veces que las obligaciones no me lo permiten y ya estoy harto de sus caracteres pasivo-agresivos y sus reclamos de madres judías, así que para que se entretengan mientras puedo escribirles algo de sustancia, ahi les dejo esto que no va con lo que suelo escribir. Así que ya saben, no quiero recibir quejas de que esto está muy largo, porque si no quieren ni tienen que leerlo, total que ni va para ustedes, pero si lo hacen, no sean groseros y no se queden callados. Besos Fornicantes.
A la Verga los Museos.


Ya somos muchos. Es un hecho que ya somos más de una generación entera los que estamos hartos más allá de lo descriptible de que nos digan que la cultura vive en los museos.
Sobre todo estamos cansados de escuchar los mismos nombres, los mismos siete artes, y los mismos cincuenta libros como si fueran la única cosa que ha producido la humanidad en millones de años de existencia. Ya no podemos, ni queremos soportar escuchar una vez más que solo Beethoven, Picaso, El Quijote de la Mancha o El Barbero de Sevilla valen la pena, y que después de la muerte de Homero, Cervantes y Shakespeare la humanidad no ha vuelto a hacer nada que valga la pena.
Parecería entonces como si todo tiempo pasado fuera mejor, como si, estos gigantes, canónicos en si mismos hubieran construido estandartes sagrados, como dioses, que no deben ser tocados ni cuestionados, sino venerados como prueba de que la humanidad se hace cada vez más estúpida, prueba de que los jóvenes no tenemos por que abrir la boca, pues estaremos de antemano equivocados, porque no somos Immanuel Kant ni René Descartes.
Inevitable. Cada vez somos más, y estamos más hartos de ser ignorados. Esta misma cultura pedante e intelectualoide que hubiera querido que nos quedaramos callados aceptando sus pruebas de nuestra inferioridad parece haber olvidad el origen del impulso creador que llevó a estos gigantes de la cultura Occidental a producir sus más grandes obras: La pasión, la inconformidad, la rebeldía, el desacuerdo, una nueva manera de ver la realidad, y el estar hartos de quedarse callados. No parecen haberse dado cuenta de la contradicción de venerar estas virtudes en sus íconos, y clasificarlas como defectos en nosotros, las nuevas generaciones.
La respuesta, entonces, no se dio a esperar: si nuestras voces iban a quedar condenadas al silencio y a la exclusión de su parte, nosotros no teníamos por que guardar una actitud de respeto ante sus ídolos sacros. Si no nos querían en su mundo, no nos tendrían ahí, pero no nos iremos al olvido a donde les gustaría relegarnos. Crearemos nuestro propio mundo, un mundo habitado por Comics y Videojuegos, un mundo de MTV y los beatles; no importa si ellos no estan dispuestos a escucharnos, nos escucharemos entre nosotros mismos. Formularemos nuestros propios ideales, nuestros propios principios, y como reacción a su mundo, tendremos a los Simpsons y Southpark, tendremos la Ironía. Aceptaremos ser ignorados por ellos, pero no guardaremos un respetuoso silencio. Nos burlaremos de sus ídolos, tomaremos sus contradicciones y las amplificaremos, les arrojaremos a la cara todo lo que no quieren ver de si mismos, todo lo que les gustaría que –como nosotros- no existiera para afear su mundo.
Nuestro nuevo mundo es una de las más grandes rupturas de los últimos tiempos, al mismo tiempo que una de las más emocionantes aventuras, lista a redefinir en todo lo posible la vida y al ser humano dentro de ella. Hemos asistido al cuestionamiento de todo: desde la política hasta la organización social. Hemos sido testigos del surgimiento de nuevas propuestas estéticas en todos los campos, así como la ascensión de nuevos fenómenos de comunicación –como el videojuego o el comic- al nivel de las artes. Tenemos a Tarantino y a Kaufmann, a Gondry y a Jonze, a los Beatles y a Morrison, a Warhol y a Pollock, a Halo y Half Life, ya no estamos en silencio, tenemos ídolos, íconos, millones de estilos, canales de comunicación, tenemos medios, tenemos fines, y más importantemente, nos tenemos a nosotros mismos. Tenemos Voz.
Pero no todo han sido ventajas de vivir en este nuevo mundo. La ruptura con ellos y sus museos no vino gratis. Nos hemos acostumbrado a escuchar solo nuestra propia voz. Si algo caracteriza a los que estamos hartos de que se nos imponga la cultura de museo, es una marcada desconfianza a todo lo que provenga de ahí, lo cual en sus formas más extremas se manifiesta como intolerancia y cerrazón estúpida y violenta a cualquier cosa que no sea aprobada por las voces de esta generación.
Por si eso fuera poco, al escuchar solo nuestra propia Voz, hemos perdido la habilidad de entender otras voces, hemos olvidado como hablar el dialecto del que renegamos, lo cual nos deja en una seria desventaja. Puede venir en forma de Déficit de Atención, que no nos permite leer un libro si no tiene dibujitos, o ver una película en la que no salga Keanu Reeves pateando a agentes con traje y lentes oscuros en un refrito del Platonismo y Constructivismo, y peor aun si dura más de hora y media, o es en blanco y negro. O puede venir también como desinterés y aburrimiento, o insensibilidad en general ante cualquier cosa que huela a museo. Si esto es así y es auténtico, bien. Nadie puede ser culpado por no emocionarse o interesarse por algunas cosas y si por otras; más bien es así como funciona todo este asunto de los gustos y la apreciación. Más aun si, como una Colonia que recupera su independencia, se rechazan los productos que vienen del antiguo opresor, nadie puede ser culpado. Pero eso si, no crean que esto viene sin un precio.
Y el precio puede ser tan alto como convertirnos en aquello contra lo que luchamos: Personas intolerantes y prejuiciados, deseosas solamente de escuchar su propia Voz y dispuestas a rechazar todas las cosas que no provengan de ellos, guiados por la ceguera del miedo. En resumen, envejecer, y como casi todas las revoluciones de la historia, fracasar en el camino. No cambiar nada de lo que nos molestaba en un inicio, ante lo que nos revelamos, sino más bien solo derrocar a los opresores de su trono para colocarnos nosotros en ellos. Cambiar la Museocracia por la MTVocracia no es precisamente mi idea de progreso. Y la peor parte no se la llevarán ellos, sino nosotros. No hay peor pérdida que cerrar los ojos y los oidos a lo que nos rodea y que es ajeno a nosotros; buscar solo la autoconfirmación en nuestras propias voces y a nuestros propios ojos no es solo una de las muestras más patéticas de inseguridad, sino también la mejor manera de perderse de un millón de maravillas del universo. Creer que somos los únicos que tenemos algo que decir nos garantiza de que nos perderemos las millones de cosas que se han dicho y que valen la pena, por el solo hecho de no provenir de nosotros. Y quien estrecha su propia cosmovisión por miedo o ignorancia, tiene su propio castigo en su actitud.
Yo no puedo decir que participo al cien por ciento de esa actitud… sería mentira. Pero debo confesar que soy parte de mi época, y que me entran dudas cada vez que alguien me invita a un concierto de música clásica. Nunca me siento muy cómodo cuando sé que se acerca una exposición de 100 diapositivas de las obras clásicas de la escultura, y creo que hay pocas cosas más horrorosas para mí que leer a Góngora. Sin embargo, eso viene de mi parte mucho más de un sincero aburrimiento o incapacidad para comprender la obra, a veces por falta de contexto o información, a veces por no compartir el código o la capacidad para leerlo, pero nunca por rechazo. Considero que tener esta actitud me ha dado mucho más de lo que me ha exigido. Gracias a ella soy aficionado a muchas obras de la filosofía clásica y medieval, entre otras, y realmente he descubierto a algunos compositores de música clásica que me atrapan sin remedio. He podido leer algunas de las aventuras más interesantes y la poesía más desgarradora gracias a no haberme cerrado a lo que no proviene de mí, y a intentar las cosas antes de rechazarlas.
Pero mentiría si dijera que no siento rechazo o desconfianza por algunas cosas desde antes, o por lo menos una abierta e inexplicable hueva. Una de estas cosas era el cine de Fellini. Y es que la sola mención de este nombre es suficiente para arrancar un falso gesto de éxtasis de cualquier pseudointelectual del cine. Es uno de los más grandes ídolos, uno de los clichés más repetidos y una de las vacas más sagradas en los círculos del cine culto o de museo. Entonces, obviamente, alguna parte de mi inconsciente me gritaba: “¡Cuidado! ¡Píldora para dormir!”. Muy en el fondo de mí, pensándolo sin pensar, sabía que Fellini tenía el potencial de ser tan emocionante como una Historia Extendida del Uso de las Cucharas en la Monarquía Inglesa. Y por supuesto que pospuse en todo lo posible el enfrentarme al cine de este individuo, pero al fin y al cabo el momento tenía que llegar, y solo había una forma de averiguar la capacidad somnífera de este respetado señor…

Monday, August 29, 2005

Así Habló Homero


Sientan, perros malditos, toda la verguenza que deben sentir ante el hecho de que la sabiduría mostrada por Homero Simpson en un solo episodio es mucha más de lo que la mayoría de nosotros podrá exhibir en toda su desperdiciada vida... deléitense con las siguientes amarillas reflexiones repletas de verdad sobre algunos de los temas más importantes para nuestra posmoderna sociedad:

Sobre La Naturaleza De La Mentira

  • Homero: Marge, no estaba mintiendo, estaba escribiendo ficción con mi boca...

  • Homero: (A Si Mismo) Mmmm... ahora viene el delicioso período entre la mentira y el momento en que es descubierta...

De Las Grandes Mentiras En El Fenómeno De La Literatura

  • Homero: Juré no volver a leer desde que "Matar a un Ruiseñor" no me proporcionó ningún consejo sobre como matar a un ruiseñor...

Tuesday, August 23, 2005

Manual Del Perfecto Solitario II

Más consejos de como tratar a las mujeres, para el hombre solitario...
¿Está usted peleándose a gritos con ella? ¡Grítele sus defectos! ¡Demuéstrele por que no debería estar viva! Seguramente eso arreglará todo...


Después de todo, lo importante es tener la razón.

Sunday, August 21, 2005

¿Saben cual es su maldito problema?

...Ustedes creen que el dinero no compra la felicidad...

El Mundo Según Tirso

Esta nueva serie de posts se va a desarrollar basándose en un postulado previo: Yo debí ser Dios.
Aunque ustedes no lo crean, este no es solo un desvarío de una mente despidiéndose de la sanidad mental, no es la más alta manifestación de mi megalomanía, no es una blasfemia para irritar al creador y tentarlo a arrojarme más plagas y langostas. Aceptémoslo... las cosas tal y como El las dejó no están bien.
Ya me cansé de no ser Dios, y lo he estado pensando mucho, y ni siquiera creo que El haya hecho un tan gran trabajo como para extrañarlo si Yo lo derrocara de Su puesto. En cualquier parte de la tentación donde uno pose sus ojos y preste tantita atención se puede uno dar cuenta de que el de alla arriba no anda dando su mejor esfuerzo; carajo, en la mayoría de los casos el trabajo no solo no está bien hecho sino que está difícil que pudiera estar peor. Desde el ornitorrinco a la reelección de Bush, pasando por la guerra bacteriológica, las relaciones interpersonales, la escuela, el SIDA, la Academia, Fernando Delgadillo, el cine de Disney y hasta el Amor, podemos darnos cuenta de que Alguien la anda cagando en grande, y aparte tiene la desfachatez de descansar el domingo. ¿Que estaba pensando? "A Guevo... me quedó bien chingón todo este desmadre... Mejor imposible...." No no no.
Solo digo, si yo estuviera a cargo del changarro, otro gallo cantaría. Y para inaugurar la visión de la creación por su Gran Fornicador, permítanme anunciarles que lo primero que haría sería hacer mujeres más racionales. A saber, uno podría acercársele a la vieja más buena de la fiesta a las 3 o 4 de la mañana con el siguiente argumento: "mira, corazón... ya es bien tarde, y ya no vas a encontrar a nadie hoy, así que ¿que opinas si vamos a ponerle tú y yo? ...digo, de ya no coger hoy, a coger conmigo, pues está mas chido". Y ellas no podrían hacer más que admitir la férrea lógica de un razonamiento tan bello y copular con uno como bestias salvajes, en vez de fingir indignación para tapar sus deseos sexuales mal reprimidos.
Así funcionaría este desmadre bajo mi administración. ¿Que dicen? Denme una oportunidad.

Wednesday, August 17, 2005

Grandes Decepciones

Todo parece mejor al principio, pero no hay que dejarse engañar, luego que uno lo ve bien, todo es una mierda. Como consecuencia, frecuentemente me desilusiono de cosas en la vida. En honor a todos ustedes que también han elegido la decepción como modo de vida, inauguro esta nueva serie llamada "Grandes Decepciones" con los dos animales más decepcionantes. Yo solo me sabía sus nombres y me imaginaba las cosas mas chidas del mundo, y luego cuando en algún momento vi sus fotos, pues, emm, hablan por si mismas...


1. Demonio de Tazmania

2. Dragón de Komodo

Pero como no todo en este mundo son decepciones, aquí les dejo con un animal que por el contrario, está mucho más chido de lo que su nombre promete:

3. Perezoso

Guess Who´s Back?

Después de mes y medio con serios problemas emocionales, de salud, de impuestos, de faldas, de exceso de velocidad, de corte y confección, y sobre todo de internet y falta de computadora, estoy de regreso, por que como dice más de una tía bien intencionada pero mal leida, "Dios aprieta pero no ahorca a los Grandes Fornicadores"; y así, mis fieles sujetillos, y pa que vean que les quiero, me tienen con ustedes en mi primera noche de internet dandoles lo que tanto les gusta que les de en las noches: un par de posts (¿o que, a poco no se han fijado que casi todos mis posts se publican después de la una de la mañana?).
Dejen de pellizcarse para ver si sueñan, esto es una realidad. Otra temporada de Gran Fornicio empieza, con mucho que contar, acción lésbica al por mayor, escenas en las duchas, grandes revelaciones filosóficas, historias eróticas que involucran enanos, monjas, borregos y duendes de jardín, y todo esto con un 80% más de obscenidades que nunca!
Siento el poder del internet fluyendo por mis venas! Hay tantas cosas por hacer, averiguar el verdadero origen del ajedrez, conocer más sobre nuestros autores favoritos de literatura universal, enterarme de cada detalle de cada película que me ha gustado en la vida, conectarme, en fin, con el resto del mundo y formar parte de esta maravillosa y utópica comunidad de información donde todos juntos, con el solo poder de la creatividad humana podemos intentar construir un futuro mejor...
...A la verga, ya me aburrí, voy a darle al internet el uso para el que fue creado: ver porno.

Saturday, August 06, 2005

Póngale lo sabroso

Es bien sabido por todos los pensadores desde la antigüedad clásica hasta la posmodernidad que hay una pregunta y una afirmación que han turbado cada vez más al hombre desde tiempos inmemoriales, que probablemente se remontan tanto como a los antiguos druidas, de quienes se dice ya hacían esforzados y pujantes intentos por lograr la mezcla perfecta de la una y la otra.
La afirmación, es, obviamente, que a todos los animales les tocó un super-poder. A los pajaros les tocó volar, a las chitas correr muy rápido, a las arañas caminar por las paredes, a las ovejas… bueno, algo les ha de haber tocado a las ovejas, además ya entendieron el punto.
La pregunta, por tanto, que perturba al ser humano se formula como sigue: si uno pudiera elegir un super-poder animal para aprovecharlo e integrarlo como parte de la propia vida, ¿Cuál sería?
La combinación de estos dos elementos, como cualquier párvulo sabe, dio origen a los superhéroes, que son muchos y muy variados, y un gran número de ellos toman algún super-poder animal y lo usan para mejorar la vida en general. Sinnúmero de ejemplos que se me hace superficial mencionar existen, y han aprovechado la mayoría de los poderes de los animales más chidos de la tierra. Sin embargo, la búsqueda del superhéroe perfecto continúa hasta la fecha, como lo hacía desde los hombres de las cavernas, continúa la apasionante persecución del hombre por el sentido de la vida y la mejor combinación entre una persona y un súper-poder animal.
Pues bien, yo quiero poner mi granito de arena, que creo puede ser más bien un desierto completo, pues me parece haber encontrado la combinación perfecta y no comprendo como pudo haber sido pasada por alto durante tantos siglos y por mentes tan ilustres. Pues bien, si están listos para que les sacuda su mundo, déjenme decirles que si yo fuera un superhéroe y pudiera tener cualquier súper-poder animal, dirigiría mis ojos a nuestro buen amigo el Oso, tomando de él nada más y nada menos que el increíble y super-cool poder ultrachido de… ¡Hibernación!
¡A Güevo! Imaginen las posibilidades: No te gusta la situación, un asesino en serie devasta la ciudad, la inflación le acaba de añadir un cero más a todo, no encuentras trabajo, te deja tu novia o empieza otra temporada de la academia y ¿que haces? ¡Mandas al mundo a la verga y te duermes! Te echas unos seis mesecitos y regresas a ver como andan las cosas, y si todo sigue igual, a la chingada, que pa´ eso es la Hibernación. Y en casos realmente extremos como radiación nuclear, regreso de Mili Vanili o reelección de Fox, uno puede usar el grado máximo de este poder e hibernar años enteros, o si se prefiere, hasta la muerte. ¡A la chingada con los poderes activos que le llevan a uno a meterse en las vidas de los demás y tratar de resolverlas! Que cada quien cultive su propio jardín. Y si a mí me preguntan, todo ese rollo de hacer frente a los problemas está muy sobrevalorado. ¡Arriba la apatía y la evasión! ¡Arriba el Oso!

Suena realmente obsceno, lo se, pero no lo es. Ya solo me falta ponerle nombre a mi Superhéroe oso, acepto sugerencias, y si alguno de ustedes geniecillos cree que existe un supermejor superpoder superanimal, soy todo superoidos.

Escuchando: The Postal Service, Give Up
Tom Waits, The Early Years

Leyendo: Palinuro de México (aun)
Mechanics Of Mind
Corpus Herméticum

Viendo: Los Caifanes
Sin City (Obsesivamente, no me pasaba desde Kill Bill)

Saturday, July 30, 2005

Juégate

La vida no está hecha de certezas, la vida está hecha de apuestas.

Thursday, July 28, 2005

Cosas que no haría si tuviera a Jessica Alba en mi cama

  1. Dormirme
  2. Ver televisión
  3. Hablar de mis sentimientos
  4. No fornicar salvajemente hasta que uno de los dos caiga desmayado (Ok, para ser honesto, hasta que yo caiga desmayado; no creo que lo contrario me detuviera).

Friday, July 22, 2005

Reflexiones Profundísimas Inspiradas (Probablemente) Por La Ausencia

El tiempo sin ti, es "-empo".

Sin Tristeza

Incluso en estos tiempos
veloces como un Cadillac sin frenos,
todos los días tienen un minuto
en que cierro los ojos y disfruto
echándote de menos.
Incluso en estos tiempos
en los que soy feliz de otra manera,
todos los días tienen ese instante
en que me jugaría la primavera
por tenerte delante.
Incluso en estos tiempos
de volver a reír con los amigos,
todos los días tienen ese rato
en el que respirar es un ingrato
deber para conmigo.
Y se iría el dolor mucho más lejos
si no estuvieras dentro de mi alma,
si no te parecieras al fantasma
que vive en los espejos.
Incluso en estos tiempos
triviales como un baile de disfraces,
todos los días tienen unas horas
para gritar al filo de la aurora,
la falta que me haces.
Incluso en estos tiempos
de aprender a vivir sin esperarte,
todos los días tengo recaídas y
aunque quiera olvidar no se me olvida
que no puedo olvidarte.
Que pinche bonito ha de ser que le escriban esto a uno, ¿no?

Sunday, July 17, 2005

Y Esto Que?

No se dejen engañar por los medios, Yucatán ha sido víctima de una invasión de seres de otro planeta con forma de hormigas gigantes, venidos a la tierra con la misión de hacernos sus esclavos sexuales y utilizarnos como fuentes bioenergéticas para alimentar a su Matrix, misma que usan para dominar mentalmente a hormigas más pequeñas y arruinar los dias de campo en todas las galaxias aledañas. Lo del huracán fue una elaborada mentira planeada por estos diábolicos seres para facilitar la conquista, empezando por el punto más débil (Yucatán) sin ser molestadas por intervenciones exteriores, pues nadie enviará ayuda porque pensarán que la interrupción de las comunicaciones se debe al huracán. Maquiavélico, no...?
Yo y mi heróica personalidad hemos descubierto de manera insospechada todo esto y lo ponemos al alcance de toda la comunidad para que no vivan en el engaño, y envíen ayuda si pueden. Si no me creen, revisen los blogs de otra gente de Yucatán, y encontrarán que casualmente, nadie va a poder escribir o actualizar su blog en los próximos dias. Coincidencia? No lo creo...
Por estas razones y para no dejarles tan abandonados mientras uso mis poderes ninja para combatir a las hormigas gigantes y quizás tener un amorío o dos con bellas cyborgs del futuro, les dejo este post interactivo, pa que ustedes le den vida al changarro en lo que no estamos:

Comparta con nosotros cual es la película, libro, canción, frase, situación o cosa más fuera de lugar que haya usted experimentado, que más sincera y merecidamente le haya hecho exclamar un "¿Que pedo con esto?" o "¿Y esto que?"

Aproveche, desahogue todas esas experiencias perturbadoras que ha guardado reprimidas en el inconsciente tantos años, presuma sus curiosidades y freakshows internos, deslumbre a otros lectores con sus profundos y profusos conocimientos del reino de lo Kitsch; comencemos a armar este museo de monstruosidades poblado de seres variopintos que cubran todo el rango que va desde un libro entero de fotografías de los gluteos de Siegfried & Roy en sus pantalones blancos y apretados hasta la canción de los Chicharos Mágicos. Es más, si pueden hasta linkeen aquí pruebas de la existencia de los seres que usted afirma haber visto. Despliegue la gama de experiencias graciosas y/o perturbadoras que no está seguro si debería contar a alguien, pierda las inhibiciones, vuélvase loco, haga lo que siempre quizo, viva la vida! no falta mucho para que las hormigas gigantes lleguen a su ciudad...

Fíjese en lo Oral.

Aunque esas cosas normalmente no se hablen, alguien tiene que decirlas. No, en realidad nunca he conocido a un hombre que sepa con férrea certeza que hacer con la cara debajo de la falda de una chica. En cuanto a talento oral se refiere, la mayoría de los hombres no nos sentimos seguros de que sabemos lo que estamos haciendo cuando nos aventuramos al sur de la frontera. Es como tirarse un clavado por primera vez: uno cierra los ojos y se lanza con esperanzas de que ocurra lo mejor. Y es que no estoy diciendo que no existan, yo simplemente afirmo que nunca he tenido la oportunidad de platicar con un hombre que me diga: "yo se exactamente que tengo que hacer ahi abajo, donde, y como hacerlo", más bien, después de ciertas resistencias a hablar al respecto, todos acaban admitiendo lo mismo. Alguien, alguna vez inclusive me contó de la terrorífica experiencia de la palmada en el hombro, como diciéndole "gracias por participar, fueron buenos intentos, pero es tu tercer strike y eso significa que estas fuera". No señores, el sur del ecuador es territorio aun oscuro y poco conocido, y tenemos que colonizarlo. Por eso he llegado a la sensata y prudente decisión de cobrar mis favores y extraer de alguna de mis bellas, buenas, sensuales amigas lésbicas el entrenamiento suficiente que necesito, claro, por via oral (o sea, con palabras, no malpiense usted), ellas tienen uno, así que deben saber con toda certeza empírica que hacer ahí; un Gran Fornicador siempre debe estar en vias de superación personal, y de ninguna manera quiero aprobar el examen escrito solo para fallar en la prueba oral.

Cronofagia

La gente puede creer que el verdadero terror de la experiencia de un huracán es la violencia del viento, los rayos y la devastación de la lluvia. No, se equivocan. El verdadero terror está en la expectación, en el aburrimiento, y sobre todo, en lo evidente que se hace el lento, agonizante paso del tiempo. No avanza, se resbala; se desliza sobre una superficie pegajosa, dejándonos ver claramente que la vida está hecha de tiempo, de un tiempo que se deshace ante nosotros de manera monótona, repetitiva, irrelevante. La vida se nos deshace en el tiempo que no se detiene, que avanza lenta, pero segura e irreversiblemente. Hoy, esperando a un huracán que no llega y que no permite a nadie hacer nada, más que esperarlo, se me hace más evidente que nunca que casi todo lo que hacemos lo hacemos para evitar ver/escuchar/sentir el paso del tiempo, este desesperante desintegrarse de la propia vida, cubierto de televisión, xbox, cafes, libros, escritos, internet, conversaciones, sexo, fiestas, y cuantos etcéteras más se le quiera agregar en pos de la divina inconciencia del tiempo.
De ahi el verdadero pánico de hoy. Nada se puede hacer más que esperar, la luz será cortada en cualquier momento, así que uno no debe tener aparatos eléctricos prendidos; los vientos de más de 200 kilómetros por hora se manifestarán de repente y sin aviso, por lo que también queda descartada cualquier tentativa de alejarse de la casa, de ir a cualquier parte a distraerse. Unos dias antes el huracán absorbe toda la humedad del ambiente, entonces todo queda en una quietud seca. Esto es difícil de describir, uno lo nota sobre todo en los sonidos, y en una cierta sensación sobre la piel de que nada se mueve -quizás exceptuando el tiempo, que uno puede sentir claramente en su cotidiano deslizarse, ahora privado de distracciones-, es como si cambiara la velocidad, el ritmo de todo. Después, el mismo dia de su llegada, toda la humedad es liberada, y entonces, el aire se vuelve denso. Aquí esta lo que me interesa, esto es lo que nadie debería perderse (si usted no ha estado en un huracán, vale la pena que intente aprovechar el próximo solo para percibir este momento). Uno se da cuenta de que está en este momento no a raiz de un simple cambio en la calidad del sonido, como en la etapa anterior, sino a raiz de una transformación en la atmósfera entera. Es casi imposible encontrar palabras para esta calma más similar a la muerte que al sueño. Baste con decir que todo el ambiente se transforma, y si uno observa, lo puede notar en prácticamente todo. Esto es lo más curioso, pues el ambiente es una especie de ruido de fondo ante el cual se desarrolla la vida; son esas cosas inmutables, esas certezas que precisamente a raiz de su necesaria y constante presencia hemos dejado de notar, y solo volvemos a notarlas cuando faltan (hay quien dice que estas son las cosas que precisamente posibilitan la existencia, las cosas que se han vuelto tanto parte de nosotros que son imperceptibles, hasta que un cambio ocurre en ellas, como las bisagras de una puerta, piense usted, cuando ha reparado en las bisagras de una puerta, y que tendría que pasar para que lo hiciera); pues imagine que todas ellas cambian, no en tal grado que sea un cambio notorio para toda la especie humana, sino en un grado mínimo, sutil, suficiente para conferir a todo un marcado sentimiento de irrealidad y aproximarnos a la experiencia de la locura, como si no conocieramos nada, como si todo lo que conocieramos fuera falso, y se burlara de nosotros desde su incognoscibilidad, escondida atrás de una apariencia de normalidad, pero evidenciándose en este sentimiento de irrealidad y rareza que todas las cosas tienen en este momento. Un atardecer, por ejemplo, en el que nada se mueve, y nada se escucha, a pesar de ver gente caminando a unos metros de donde uno observa. Lo que si se escucha, acentuada, ensordecedoramente, es el zumbido anónimo del alumbrado público en una monotonía pavorosa, interminable, rota solamente de vez en cuando por el graznido metálico de un pajaro que confiere aun más el sentimiento de burla a todo el atardecer. La luz, la iluminación del mundo ha cambiado también, aunque esto es más incapturable que nada en palabras. Es como si todo hubiese adquirido un sórdido sentido de la composición del color, como si se planearan fotos imposibles, en donde colores como naranjas y azules en sus más diversas tonalidades armonizan a la perfección con tonos blancos y rosas. Es como si todo hubiése sido unificado y armonizado por esta experiencia de lo ajeno, de lo-otro-que-se-esconde-detrás-de-lo-mismo, y que nos observa en silencio, en las cosas.
Y el huracán no llega, y los medios anuncian que retrasa su llegada a un momento imprecisable, y la condena de la eternidad en la conciencia de este momento se prolonga, y se siente tan enorme como una ausencia, como la ausencia de la Vida que se siente, igual, en todas las cosas. Y la vida (con v chiquita) se nos desgaja en el tiempo, y el tiempo se nos esconde en las cosas, en las fiestas, en la tele, en el xbox, y nosotros nos escondemos en la búsqueda de la Vida, perdiéndonos en la vida y esperando a que llegue un maldito huracán que se queda en promesa. Esperando a que termine una ausencia, la ausencia más grande de todas.